Aunque cualquier persona puede experimentar ilusiones sin que ello suponga un estado patológico, algunostrastornos psicológicos pueden incluir ilusiones patológicas. Por ejemplo, una persona con psicosis y la idea delirante de que un grupo de personas está planeando su muerte, al oír una conversación cualquiera entre un grupo de desconocidos, podría escuchar su nombre y los planes para asesinarloJuan Rulfo se preguntaba “¿La ilusión? Eso cuesta caro. A mí me costó vivir más de lo debido”.La ilusión está vinculada a los sentidos y es esa capacidad que poseemos las personas para reunir todas nuestras fuerzas y concentrarlas a favor de la conquista de un objetivo.Ilusión es una palabra que procede del latín ilusionis y significa engaño. Porque así es la ilusión, es ese don que tenemos los seres humanos para creer en aquellas cosas que no vemos, pero que nos ayudan a vivir.
La ilusión está conectada a emociones positivas. Cuando nos ilusionamos nos sentimos bien, nos sentimos plenos y motivados. Nuestra mirada cambia. Nuestro estado emocional también. Nos sentimos entusiasmados y cargados de energía. Es un sentimiento que nos empodera.
Desde pequeños recurrimos a las ilusiones para construir nuestro proyecto de vida, para diseñar nuestros sueños y fijar nuestras metas. Vivimos con ella porque es la fuerza que nos empuja a alcanzar nuestros objetivos. La ilusión es nuestra compañera de viaje. Con ella pensamos dónde nos gustaría ir, qué nos gustaría ser o a quien nos gustaría tener a nuestro lado. La ilusión nos ayuda a hacer realidad nuestros sueños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario